Por: Montserrat Morales.
El 28 de noviembre de 1998, fue asesinada en Massachusetts, Estados Unidos, Rita Hester, una mujer transexual afroamericana. Para rendirle tributo y generar conciencia acerca de este tipo de violencia, otra mujer transexual de nombre Gwendolyn Ann Smith organizó un proyecto llamado “Recordando a nuestros muertos”, lo que dio origen a la actual celebración del Día de la Memoria Transexual cada 20 de noviembre alrededor del mundo.
A la fecha, es normal que mucha gente no sepa ni siquiera qué es una persona transexual. Suelen confundirlas con los travestis, pero no es así.
Las personas transexuales pueden ser de cualquier género con el cual se identifiquen, y el cual no corresponde con el sexo con el cual nacieron, por lo que, a lo largo de su vida y conforme pasa el tiempo, van buscando formas de expresar su verdadera identidad de género.
Los que nacieron “hombres” buscan sentirse “mujeres”, y viceversa. Para ello, recorren un largo camino de terapias psicológicas, hormonales e incluso llegan a realizarse la cirugía de reasignación.
De la mano de todo eso, desafortunadamente todavía hay mucha discriminación por parte de gente que simplemente no entiende que hay más formas de vida que simplemente rosa y azul o blanco y negro.
Las personas trans suelen ser víctimas de violencia, y muchas veces la sufren al doble que cualquier otra persona a causa del color de piel o de sus preferencias sexuales.
De acuerdo con el informe Violencia extrema. Los asesinatos de personas LGBTTT en México: los saldos del sexenio (2013-2018) de Letra S, las personas trans, durante ese periodo representaron el colectivo más violentado, sumaron, a la fecha de publicación, 261 asesinatos, en comparación con homosexuales y lesbianas.
Esto porque una persona trans queda, por así decirlo, evidentemente más expuesta que los homosexuales y lesbiana cis. La violencia contra estas personas va desde la verbal, pasa por instituciones de gobierno que les niegan sus identificaciones con su verdadero género, hasta la muerte.
Las personas trans siguen siendo más discriminadas, incluso por quienes dicen luchar en favor del feminismo. Ángela Ponce (Ex Miss España) ha dicho "El extremo feminismo nos niega la inclusión en esta lucha feminista que no es otra cosa que nuestra lucha, la lucha de todas. Porque el 62 por ciento de las asesinadas eran profesionales del sexo, un trabajo al que todavía muchas se sienten obligadas a recurrir porque no hay oportunidades laborales para ellas.”
La maquilladora y fotógrafa Alex Saint fue entrevistada por Sindy Takanashi, y durante su charla Saint reflexionó acerca de los cambios que su proceso conllevó. Por ejemplo, cuando todavía se le veía como hombre, nadie le preguntaba acerca de su edad, y cuando su proceso avanzó para tener su identidad correspondiente como mujer trans, se dio cuenta que ahora sí le cuestionaban su edad, y que al ser mujer había perdido muchos privilegios de hombre que el mundo machista perpetua, desde conductas hasta juicios y violencia.
Cuando Sindy le preguntó si había nacido hombre o mujer, Alex respondió que había nacido “mujer trans”. Y eso es algo que la mayoría de las personas no comprende. Alguien que nunca ha sentido incomodidad en su propia piel, no podría entenderlo, pero se debe respetar ante todo.
Aunque el cambio no parezca no asomarse por el horizonte, esa memoria por la que alzó la voz Gwendolyn Ann Smith debe seguir haciendo eco, y recordar que la lucha por los derechos humanos atañe a todos, no solo al colectivo LGBT+, y que el feminismo no es exclusivo de mujeres, sino de cada uno de nosotros, si es que queremos una sociedad verdaderamente equitativa y respetuosa, no solo tolerante. Cada forma de vida merece el mismo respeto.
