Por: Joce Benites
Se piensa que la vejez es la etapa de la decadencia, dolores y enfermedades, sin valorar que es la edad que más se puede disfrutar, incluso que la juventud ya que la experiencia adquirida a través de los años permite recuperarse rápido de las adversidades.
Hay que demostrar a las generaciones jóvenes el valor de tener un abuelo o abuela, así como de poseer años, arrugas y canas porque ¿si sabiduría se quiere tener? esa la encontraremos en las personas mayores.
Existen demasiados mitos acerca de la vejez que se contrarrestan con la actitud para sobrellevar esa etapa y como bien dicen “más vale tener la cara llena de arrugas, que el corazón lleno de estrías”.
La vejez me ha tocado ver es la etapa más feliz, donde se pierden los miedos, principalmente a los fracasos, se vuelve la persona más chistosa y divertida.
Hoy en día, las niñas y niños se quedan cortos con la espontaneidad al lado de un abuelo y una abuela; los y las adultas mayores lleva décadas en el mundo y miles de experiencias adquiridas que sustentan sus comentarios y chistes. Si de reírse y divertirse se trata con los y las abuelas bastará y sobrará.
Ahora si cariño y protección se quiere tener en los y las abuelas lo encontraras, quién mejor que ellos y ellas para consentirte y hasta solaparte, pero sobre todo para aconsejarte.
Por supuesto que las historias tristes a este sector no pueden dejarse de lado ni mucho menos evadirse, pero es por ello que, amable lector te detallamos las bondades de ser y tener un abuelo y una abuela para que seas consiente y valores la vejez porque como también dicen “es el puente seguro que hemos de atravesar”.
Por eso y como mucho se ha dicho llegar a viejo realmente es un logro y un privilegio sobre todo porque se vuelve a vivir una segunda infancia y además es la etapa en donde ya todo se tiene permitido, además de una gran oportunidad para realizar los sueños no alcanzados a lo largo de la vida, canalizándolos en otras generaciones cercanas o no a la familia.
