Fotografía: Facebook Festival Internacional de Danza Contemporánea -Lila López-
Por: Leticia Vaca
“Der Moment”, era el nombre del periodico más grande que se publicaba en yiddish en Europa; era una crónica de la comunidad judía que vivía en Polonia.
La obra que lleva su nombre y que se presentó en el Festival Internacional de Danza Contemporánea Lila López, busca recuperar la memoria histórica y ser un homenaje del 80 aniversario del levantamiento del Gueto de Varsovia.
Durante la obra, algunas de las y los bailarines, tomaron el micrófono para lanzar frases cortas que invitan a la reflexión y no ser simples espectadores. Frases que acompañadas de un lenguaje corporal se convirtieron en un llamado a decir “basta”.
“Bailaron en las cenizas de nuestras ciudades”
Der Moment es una puesta en escena que invita a la reflexión, que nos recuerda las atrocidades que el hombre ha sido capaz de cometer en la búsqueda de demostrar su poder y control, pero que también nos recuerda que somos parte de un todo y en el presente, la indiferencia también mata.
“El hombre quiere saber por qué lo odian”
Der Moment, nos recuerda que en la actualidad los exilios y las guerras continúan, que las migraciones, las violaciones a derechos humanos parecen no tener fin y por eso es importante no ser indiferentes y aportar un granito de arena desde nuestras trincheras.
También se hicieron presentes los mensajes en carteles:
“Rebelión”: esta palabra tan poderosa, nos recuerda la importancia de la unión, de buscar causas en común, de mantenernos firmes en nuestros ideales, ser valientes y defenderlos con dignidad.
“Exilio”: Nos recuerda la importancia de reconocer que todas las personas somos parte de un todo; la importancia de la solidaridad y la resiliencia en un mundo en el que sé es capaz de exterminar a poblaciones enteras.
En palabras de Cecilia Lugo, directora artística de Centro de Producción de Danza Contemporánea (Ceprodac), Der Momente es:
“Absolutamente conmovedor, porque si bien habla del holocausto y del esfuerzo de un puñado de judíos que vivían en Varsovia por enfrentarse al régimen nazi, que evidentemente no pudieron, pero sí demostraron una gran valentía, una gran rebeldía al decir ya basta, si morimos queremos morir peleando. Entonces es muy conmovedor, no solo por lo que paso, si no por lo que sigue pasando, por todos los exilios que hay actualmente en el mundo (...) no solo nos acerca a la guerra la mundial, un tema importantísimo en la reflexión contemporánea, nos trae a la memoria muchas otras guerras actuales, fuera y dentro de nuestro país ”
