Por: Xochiquetzal Rangel
Motivada por el amor que, de manera desinteresada, dan los animales, la potosina Bettzy Coronel, desde hace 10 años se ha dedicado a rescatar a perros, gatos y tortugas que viven en las calles de San Luis Potosí.
Bettzy Coronel, es una mujer con un corazón dividido en dos pasiones: ser instructora fitness y el rescate de animales, que se ha dedicado a seguir uno de sus sueños que tenía desde su infancia.
“Desde niña yo recojo perritos en la calle entonces siempre he tenido, pero mi sueño siempre era tener un lugar donde pudiera tener muchos perros y en casa solo me permitían uno o dos”, comentó.
Su deseo de poder contar con un lugar que sirviera como albergue, tenía como objetivo poderles ofrecer a los perritos y gatitos callejeros una mejor calidad de vida y amor incondicional.
Con ayuda de su familia, en el 2013 logró tener un espacio que se ubica en el Fraccionamiento Terremoto en el municipio de San Luis Potosí, en donde ha podido cuidar y sanar a una docena de perros, dos gatos y varias tortugas; así como hacerse cargo de algunas manadas de perritos que viven en la calle, pero a los que alimenta, vacuna y ha esterilizado.
Su fundación se llama "Ary y Jhon, amor animal", debido a que sus hijos, dos menores que han seguido sus pasos en la empatía y cuidado de los animalitos en condiciones de abandono.
“Mis hijos me apoyan porque es la herencia que yo les voy a dejar. Ellos me apoyan en la alimentación, limpieza, cada quien le toca darle”, agregó.
Adicionalmente a sus hijos, Bettzy cuenta con personas de gran corazón, que al igual que ella, motivados por el amor a los animales, le ayudan con la limpieza de los deshechos, alimentación y cuidados de los perritos, gatitos y tortugas, así como la adquisición del alimento necesario, como los dueños del estudio KOasicha Boxing.
“Nosotros como rescatistas sufrimos, realmente sufrimos cuando no tenemos croquetas, cuando no tenemos qué darles o cuando no tenemos para el veterinario”, destacó.
Bettzy hizo un llamado a las y los potosinos a ayudar en el cuidado de los animales que viven en la calle o se encuentran en condiciones de abandono, para poder transformar sus vidas dándoles un hogar y cariño, aunque en el caso de que no sea posible, puedan apadrinar esterilizaciones o a través de donativos a fundaciones para el mantenimiento de los animales.
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