Por: Xochiquetzal Rangel
Desde hace varias generaciones la familia Muñoz, originaria de Soledad de Graciano Sánchez, realizan una bebida dulce hecha con flor de cempasúchil, para tomar durante la temporada de DÃa de Muertos, en espera de volverse a reunir con sus seres queridos.
Karina del Carmen Rebolloso Muñoz, contó que desde pequeña veÃa cómo su abuela preparaba está bebida, con el tiempo el atole de flor de cempasúchil se convirtió en una elaboración tradicional entre el mes de octubre y noviembre, meses en los que se cosecha la también llamada flor de 20 pétalos.
"Viene de generaciones atrás, de la abuelita como dicen por ahÃ, es receta de la abuelita. Ellas (nuestras ancestras) son las que nos enseñan", comentó Karina.
Una vez que su abuelita -que vivÃa en la comunidad de Enrique Estrada del municipio de Soledad- murió, Karina decidió continuar con las tradiciones familiares y preparar el atole de flor de cempasúchil, al cual le fue mejorando el proceso y sabor.
Pese a que desde hace cerca de seis años, en el paÃs se popularizaron los productos realizados con la flor de cempasúchil, por ser una flor comestible, Karina no tiene a la venta el atole, ya que dijo que únicamente lo elabora para consentir a su familia, además de aprovechar las flores que se producen en Palma de la Cruz, comunidad en dónde habita.
Para preparar un buen atole de cempasúchil y aprovechar las flores, Karina contó que está bebida se realiza igual que otro atole convencional, solo se le agregan los pétalos de la flor, previamente lavados y secados.
Explicó que en una olla se pone a cocer la leche con una raja de canela y Maicena natural, posteriormente se le pone azúcar.
Antes de agregar los pétalos a la mezcla, se debe lavar la flor de Cempasúchil y se deja secar, para después moler la hoja naranja con agua o leche y se vierte a la olla, se le agrega vainilla al gusto. Una vez que el atole espesó e hirvió, la bebida se puede servir y disfrutar en familia.
